Gays Just Wanna Have Fun

Llega un momento en la vida de una persona (normalmente hacia finales de los veinte, principios de los treinta), cuando ya has tenido unos cuantos desengaños amorosos, cuando ya has tenido unas cuantas decepciones con personas que pensabas que serían tus amigos para toda la vida, en el que andas por la vida así un poco "looking" que te "looking", buscando algo, no necesariamente sabiendo el que: un amigo, una pareja, un trabajo mejor, una mascota... y eso es así, seas de la tendencia sexual que seas: hetero, gay, bisexual, trisexual, asexual... no importa, todos pasamos por esa fase y nos vamos volviendo más y más cínicos. Es esa edad en la que tu vida ya debería estar del todo encauzada, según los estándares de la sociedad, pero en la que te das cuenta de que no lo está y ahí es donde empieza la presión, tienes siempre la sensación de que a los que están a tu lado les va mucho mejor que a ti. Hay una canción de Robbie Williams que me gusta especialmente (Something Beautiful), que habla un poco de todo esto, dice "You analyze everyone you meet, but get no sign, love ain't kind", porque analizas todo lo que te pasa, y a todos los que pasan por tu vida, ya nada es "casual". Pues, en mi opinión, "Looking" (la nueva serie de la HBO, cuya "salida del armario" tuvo lugar el pasado 19 de enero y que terminó su primera temporada ayer domingo, habiendo sido renovada a una segunda) trata sobre todos estos sentimientos en unos tiempos donde la tecnología y las redes sociales (Grinder, Tuenti, Badoo, Bender, Meetic, OkCupid...) substituyen los juegos de miradas, la seducción, y todo aquello que haga referencia al flirteo en el sentido tradicional del término.

La serie tiene como protagonistas a Patrick, un diseñador de videojuegos interpretado por Jonathan Groff (visto en "Glee" y en el interesante piloto de Ryan Murphy que nunca vio la luz y del que hablamos en un post: "Pretty/Handsome") a Agustín, el mejor amigo de la universidad de Patrick, que intenta hacerse un hueco como artista en San Francisco (interpretado por Frankie J. Alvárez, visto en algunos episodios de "Smash") y a Dom, un somelier en un restaurante de alto copete, que tiene el sueño de montar su propio negocio (interpretado por Murray Bartlett, actor australiano que se ha paseado por varias series, y que también interpretó a un personaje gay en un episodio de "Sex and the City"). En mi opinión, los personajes están bien definidos (todo lo bien definidos que pueden estar en estos 8 episodios de los que ha constado la primera temporada), con sus tics, sus defectos, sus manías, un pasado que les define como personajes de veinte y, treinta y o casi cuarenta y, como es el caso de Dom. ¿Son personajes estereotipados? Un poco sí, el friky, el hipster y el cachorras de gimnasio frustrado laboralmente, pero los estereotipos no tienen por qué no funcionar y yo creo que bien llevados, con buenos guiones, buenas historias, buenas interpretaciones, y el sello de calidad de la HBO pueden funcionar y funcionan. Incluso en un episodio el propio Dom dice "God! I'm such a cliché!"

Los personajes secundarios tampoco se quedan atrás. Tenemos a Frank (el novio desde hace mucho tiempo de Agustín) de origen cubano. Richie, el nuevo interés amoroso de Patrick, un peluquero de origen mexicano, que es el prototipo opuesto al de los chicos que normalmente le gustan a Patrick, y que en todo momento tenemos la duda de si le gusta realmente o simplemente Patrick se ha propuesto demostrar a sus amigos que no es un snob que se guía por las apariencias y los prejuicios a la hora de salir con alguien. Kevin, el nuevo jefe (gay como la vida misma) de Patrick, con el que habitualmente Patrick mete la pata o se pone en ridículo en situaciones algo embarazosas; entre ellos hay una clara tensión sexual y una clara atracción que en ocasiones traspasa la pantalla y que ha dado lugar a lo largo de la temporada a esos momentos "quiero y no puedo" que tanto nos gustan entre los personajes; este personaje está interpretado por Russell Tovey (conocido por interpretar a un hombre lobo en "Being Human", la original inglesa). Está Lynn, un empresario al que Dom conoce en una sauna (el típico sitio donde buscar contactos laborales) y que parece que va a ayudarle a montar su propio restaurante. Lynn está interpretado por Scott Bakula, lo vimos en "American Beauty" interpretando a uno de los miembros de la pareja gay (Jim y Jim), que viven en la casa de al lado de los Burnham, irónicamente la única pareja estable de la peli... Y, finalmente, está mi secundario favorito: Doris, una enfermera deslenguada y muy amiga de los gays, especialmente de Dom, su mejor amigo y compañero de piso. Doris siempre dice lo que piensa y tiene una voz algo carajillera, así a lo Bonnie Tyler cantando Total Eclipse of the Heart, que hace que todo lo que dice resulte aún más divertido.

Quiero centrarme un poco más en la relación Doris/Dom, porque creo que es uno de los grandes atractivos de la serie. Tienen una química increíble, son compañeros de piso, en el pasado in a galaxy far, far away estuvieron liados y, al parecer, eso les da derecho a opiniar sobre sus respectivas vidas sin ningún tipo de pelos en la lengua. Los guionistas le reservan a Doris algunas de las líneas más divertidas del guión. Como cuando Dom se siente triste y queda con un chico por internet, que ni tan sólo le gusta demasiado. Al día siguiente, se encuentra en el salón con Doris, el muchachillo de internet se está duchando y cantando como una loca el Defying Gravity y Doris le dice a Dom "Te quitaste la pena follándote a un miembro del cast de Wicked ¡Hay un jodido 'monkey boy' en mi ducha!". Doris siempre tiene razón en todos los consejos que le da a Dom, da rabia y todo, porque lo que le dice no es lo que él quiere oír, pero es la verdad y eso es justo lo que hacen los buenos amigos. Las conversaciones importantes que tienen cuando salen a correr por las empinadas calles de San Francisco son verdaderas joyas. Juntos hacen cosas que sólo harías con gente con la que tienes una confianza total y con la que no te importa parecer completamente ridículo, como practicar Zumba.

A veces las conversaciones y la química entre los personajes pueden recordar en un primer momento a las conversaciones que Sarah Jessica Parker y sus amiguitas tenían mientras hacían un brunch en el local más trendy del momento (no sé si con esto animaré o ahuyentaré a la gente a ver la serie, pero bueno correré el riesgo...) eso sí con un toque pink. Así se habla de temas importantes como tener o no tener prepucio (esa es la cuestión), si realmente ser pasivo es humillante, sobre hacer maratones de "Las chicas de oro", sobre si se te nota la pluma en tu mensaje de bienvenida del contestador automático, sobre si crear eventos o taggearse en fotos donde apareces pasándotelo súperbien para informar al mundo de lo cool que es tu vida, sobre la importancia de aceptar en Facebook a un ex por el que aún sientes algo, o simplemente intercambiarse opiniones sobre si merece la pena o no quedar con alguien basándose en cómo se describe él mismo en su perfil de on-line dating y en la foto que ha elegido con mayor o menor acierto para que le represente. Todo ello substituyendo el atractivo New York de "Sex & the City", por la ciudad que se encuentra somewhere over the Rainbow (San Francisco) como núcleo de la cultura gay.

También me encanta que hagan referencia o otros shows de televisión que se han convertido en un punto de referencia de nuestra cultura. Por ejemplo, cuando Agustín abandona el apartamento de Patrick, después de compartir piso durante muchos años, para irse a vivir con su novio y Patrick le abraza y dice "Thank you for being a friend /Traveled down the road and back again / Your heart is true you're a pal and a confidant", la letra de la canción de "Las chicas de oro", toda un hit en la vida de cualquier gay que se precie. O cuando Patrick se toma un día libre en el trabajo para tener una cita de 24 horas con Richie y deciden ir al planetarium a divisar un firmamento de estrellas postizo y Patrick remarca que parece la primera cita de Ross y Rachel en "Friends", incluso llevando la referencia más allá, indicando quién será Ross y quién será Rachel, o sea quién hará de activo y quién de pasivo...

Como he dicho antes, esta primera temporada ha constado de sólo 8 episodios, por lo que tampoco podemos analizar muy profundamente todas las posibilidades de la serie. Pero, aún así, podemos decir que han ido asentando unas buenas dinámicas entre los personajes que creo que los guionistas han sabido hacer florecer en el season finale, donde hemos podido comenzar a ver los frutos de las diversas semillitas que han ido plantando a lo largo de la temporada. En el final de temporada, obviamente no tenemos un súper cliffhanger a lo "se abre la falla de San Francisco y ocasiona un terremoto que mata a todos" pero que, aún así, nos ha dejado con ganas de más.

 

 

David