La serie estaba situada en un complejo de apartamentos (un descarado decorado) situado en el 4616 de Melrose Place, en West Hollywood (California). Allí un grupo de JASP vivían muy felizmente, al principio... antes de que estallaran bombas, alguien se cayera por las escaleras, otro alguien muriera ahogado en la piscina, tuvieran lugar peleas de gatas en el patio (que estupendo era esa especie de patio andaluz, por Dios..., yo a mi edad aún estoy esperando encontrar un apartamento con un patio como ese del decorado de la serie que esté por aquí cerca, en el barrio...), y un largo etcétera que ya comentaremos.


Los personajes pasaban verdaderas montañas rusas emocionales, algunos pasaban de ser encantadores a ser verdaderas víboras de una temporada a la otra. Podríamos decir que todos los personajes de la serie pasaron por alguna fase oscura en la que tomaron decisiones equivocadas y moralmente muy cuestionables; incluso los más pepones como Billy, Alison, Jane y Matt tuvieron su momento mezquino. De la misma manera, los malos malísmos como Michael, Amanda, Sydney o Kimberly (curiosamente más bichas que bichos, las mujeres siempre resultan unos personajes malvados más interesantes, fijémonos en Disney, tiene estupendas villanas y muy pocos y menos recordados malvados) también tenían sus momentos de redención, cuando pasaban por algunos dramas personales que los humanizaban y hacían que empatizáramos con ellos. No sé si fue a partir de la cuarta o quinta temporada que los guionistas ya le tenían bien cogido el punto a los personajes y habían creado unas buenas dinámicas entre ellos, y por ello los diálogos empezaron a subir de tono y a dar verdaderas perlitas para la posteridad.

Brooke: Primero seduces a mi padre y luego lo matas, dos semanas más tarde te acuestas con mi marido...
Alison: Lástima que no tengas un hermano...
(Alison se ha quedado ciega, temporalmente, tras la bomba que explotó en MP)
Brooke (a Alison): Perdona el chiste fácil, pero supongo que no nos VEREMOS en la fiesta...
(...)
Brooke (a Alison): ¡Aparta tus sucias manos de mi marido, zorra ciega!
(...)
Brooke (a Alison): Lo siento, ser una perra se ha convertido en un acto reflejo.
Aprovecho para dejar la escena de la muerte de Brooke en la piscina, estaba fatal esta pobre diabla...

Sydney: Estamos hechos el uno para el otro. ¿No lo entiendes?
Michael: A ver si lo pillas, Sydney. Eres una zorra estúpida que ha cruzado la línea y no quiero volver a ver tu cara nunca más.
Sydney: Jane me advirtió sobre tu mal humor matutino...
(...)
Michael: Syd, quiero el divorcio.
Sydney: Y yo quiero despertar mañana por la mañana y cantar como Aretha Franklin.
Las cosas llegaban a liarse tanto que eso daba lugar a diálogos absurdos como éstos:
Michael (en su reunión de la universidad hablando a un compañero de clase sobre su matrimonio con Jane): En realidad, eso no funcionó y entonces mis siguientes dos mujeres murieron.
(...)
Amanda: Divorciada, casada, viuda, y todo en qué? 48 horas? Wow...
(...)
Matt (a Kimberly, después de que ésta le pregunte por qué no quiere ir a almorzar con ella): Kimberly, hiciste estallar este lugar con una bomba y, para serte franco, es difícil que contigo olvidemos eso...
(...)

(...)
Amanda: Espero que mi seguro cubra bombarderas locas...
Las peleas entre Amanda y Alison también eran memorables:
Amanda (a Alison): No me digas que lo dejas otra vez...
(...)
Amanda (a Alison cuando ésta ha dejado D&D y está trabajando como camarera en el Shooters): Esto no es de tu incumbencia, camarera. Y ahora ve y tráenos más comida...
(...)
Amanda (a Alison por su nuevo trabajo como camarera): Por fin has encontrado el trabajo perfecto para ti, rodeada de alchohol...
Sydney y Kimberly formaron una pareja de locas encantadoras:
Kimberly: Es necesario que te centres. Piensa, Sydney ¿qué es lo que tú y Michael tenéis en común?
Sydney: Hace dos semanas te hubiera dicho que odiarte... sin ánimo de ofender...
(...)
Sydney: Por cierto, Kimberly, ¿Cómo va el electroshock? Ciertamente ha dado un atractivo volumen a tu cabello.
La serie, como todo buen culebrón que se precie, nos dio momentazos tan descabellados como súmamente divertidos y que fueron imprescindibles para el desarrollo de las insensatas tramas y de los evoluciones y cambios imposibles de personajes. El descubrimiento de que Michael (hasta el momento el marido perfecto) está teniendo una aventura con su compañera de trabajo Kimberly; la llegada de la pesada hermanita de Jane (Sydney) a MP; la reaparición de Kimberly unos meses después del aparatoso accidente de coche que tuvo con Michael, por el que la creíamos muerta, y la impactante imagen de ella quitándose una peluca que tapa una horrible cicatriz en la cabeza; Alison, momentos antes de casarse, dándose cuenta de que había sido víctima de abusos sexuales en su infancia por parte de su padre (quizás por eso durante toda la serie bebe como una cosaca...); Kimberly secuestrando al bebé de Jo; Amanda ascendiendo como jefa de D&D después de que su jefe se ahorcara, como resultado de un entremado que ella misma diseñó; Kimberly, poseída por sus demonios, haciendo volar por los aires Melrose Place con explosivos; Brooke ahogándose cuando llega borracha al bloque de apartamentos y se tropieza en la piscina; en una ironía de ironías, Kimberly convirtiéndose en psiquiatra y aconsejando a una mentalmente torturada e inestable Sydney.
Para que el cocktail del éxito funcionara, hacía falta una buena dosis de SEXO. Era un no parar (bueno, todos menos Matt, el gay, que parecía un célibe). Michael con Jane, Michael con Kimberly, Michael con Amanda, Michael con Sydney, Michael con Megan (una prostituta que también vino a vivir a MP a partir de la quinta temporada), entre otras; es raro que no se liara con su hermana, Jennifer Mancini (Alyssa Milano). Amanda con Billy, Amanda con Jake, Amanda con Michael, Amanda con Peter (el jefe del hospital donde trabaja Michael, que comenzó a salir en la tercera temporada y que luego ya se quedó hasta el final) entre otros. Estos fueron los más promiscuos, pero los demás no se quedaron cortos: Jake además de su larga relación con Jo, estuvo tambien con Jane y con Alison, para poner un ejemplo, un mamoneo en melrous pleis que no veas...
Combinado con CRIMEN. Alison siendo acechada por un acosador, que le mandaba al trabajo rosas negras y mensajitos donde la llamaba puta; Sydney arrestada por prostitución; Michael intentando asesinar a Syd en su luna de miel con veneno, ahogándola, y empujándola por un acantilado; Kimberly atropellando a Michael con coche de Jane y una peluca a lo Jane; Alison atropellando a muchacho en bicicleta mientras conducía bajo los efectos del alcohol; tras la bomba, Mackenzie Hart muere de un ataque al corazón, Alison se queda ciega y Kimberly inconsciente en la piscina (vaya mierda de bomba, para mí que hizo llufa); Jane se poniéndose a lo Glenn Close en atracción fatal cuando Jake comienza a salir con Alison y accidentalmente prende fuego al apartamento de Alison, lanza un ladrillo a través de la ventana del apartamento de Jake y raja los neumáticos del coche de Alison; entre muchos otros.
Y una buena dosis de ALCOHOL y DROGAS. Los habituales problemas de Alison con el alcohol eran un clásico, comenzó en la segunda temporda, en la tercera fue a rehabilitación, pero volvió a caer en la quinta... Michael fue adicto a los calmantes en la primera temporada; Matt a las amfetaminas (claro como no follaba...), Sydney a la cocaína... vaya perlitas, eran unos JASD (Jóvenes Aunque Sufiecientemente Drogados).
La serie finalizó en el año 1999, tras 7 temporadas y un total de 226 episodios. Dio lugar en 1994 a un spin-off llamado "Models Inc.", donde la madre de Amanda, Hillary Michaels (interpretada por Linda Gray, la Sue Ellen de "Dallas") dirigía una agencia de modelos descarriadas (drogadictas, prostitutas, bulímicas, asesinas,...), pero la serie no pasó de su primera temporada (a mí me parecía entretenida...) y en el 2009, intentaron resucitar "Melrose Place", pero sus malísimas tramas, sus horribles personajes, las bajas audiencias hicieron que se cancelara tras sólo una temporada.